
Cada 8 de diciembre, millones de fieles celebran el Día de la Virgen María, una fecha especial dedicada a la Inmaculada Concepción, símbolo de fe y devoción para quienes profesan el catolicismo. La festividad tiene sus comienzos en España, cuando en 1644 los católicos decidieron celebrar este día para rememorar lo sucedido en la Batalla de Empel. Sin embargo, la tradición se materializó en el año 1850, cuando le pidieron al papa Pío IX que declarara un dogma a la Inmaculada.
En tal sentido, el cura párroco de la Basílica Nuestra Señora del Rosario y San Benito de Palermo, Ruben Avellaneda, indicó a EL TELEGRAFO que “se celebra el día de la madre de Jesús, que fue concebida sin mancha del pecado original porque en ella iba a nacer el hijo de Dios, el Redentor. En los Evangelios aparece al final de la vida de Jesús, cuando María a los pies de la cruz recibe de su propio hijo ser la madre de todos nosotros. Por eso, para los cristianos desde hace dos mil años María tiene un lugar tan preponderante, tan central en nuestra fe porque ha sido elegida para algo especial”.
“Y es también ella el modelo de la primera gran seguidora de Jesús, de su propio hijo. Se dice que María antes de concebir a Jesús en su vientre, lo hizo en su mente, fue la primera gran discípula. Tempranamente en el 430 en el siglo V en un Concilio de Éfeso, ya a María se la llamó como madre de Dios, qué atrevidos fueron aquellos santos padres en esa época. Y en estos dos mil años ha sido muy considerada y muy tenida en cuenta por el pueblo cristiano. En 1850 por el papa Pío Nono se declara el dogma de que fue concebida sin el pecado original y desde entonces se celebra la fiesta de María, donde nacen distintas advocaciones pero María es una sola”, precisó el sacerdote.
En Uruguay, desde fines del siglo XIX “con la separación de la Iglesia y el Estado, en que se sacaron los nombres propios de festividades religiosas y se decidió ponerles un nombre civil. Desde ese momento, al 8 de diciembre se le comenzó a llamar como el Día de las Playas y la Iglesia aceptó y propuso bendecir las playas, lo cual también vamos a hacer mañana en nuestra misa”, dijo.
“Después hay otra tradición católica que el 8 (hoy) es cuando comienza a armarse el pesebre. Desde hace algunos años, muchos fieles comenzaron a colgar balconeras en sus ventanas que nos recuerdan la próxima Navidad, poder centrarla como una fiesta de encuentro con la familia donde se brinda, pero recordando que la raíz de ese encuentro es celebrar el nacimiento de Jesús. Por eso las balconeras dicen ‘Navidad con Jesús’. Es un buen momento para recordarles a todos que en las fiestas tan ruidosas, el centro es de Dios, pero eso no quita todo lo otro porque lo religioso implica, une y unifica la vida humana. Una persona es enriquecida y embellecida con el regalo del don de la fe”, dijo Avellaneda.
El mensaje para hoy “es tener presente que en nuestras vidas necesitamos de Dios, que cuando vino al mundo nos dio también a su madre como auxilio, como la intercesora y la que atiende a los que somos peregrinos y necesitamos mucho de nuestra madre del Cielo”.
PROCESIÓN Y MISA
En Paysandú “tenemos el monumento público en Playa Park (en la avenida Batlle y Ordoñez y Ledesma) donde llevamos adelante nuestra celebración de este día tan especial”. Por tal motivo, hoy “se suspende la misa de las 19 en la Basílica. A las 20 vamos a salir en procesión por Florida y Monte Caseros, luego vamos por Zorrilla de San Martín al norte y tomamos por Charrúas hacia el oeste; donde al fondo nos encontraremos con el Monumento a la Inmaculada donde en el entorno de las 21 celebraremos la misa”. Además, “desde allí bendeciremos el agua y las playas para que sea un lugar de esparcimiento, de gozo y de bien para todos aquellos que usemos este verano el río Uruguay”, dijo el cura párroco.