Las inspecciones estructurales, tanto en la superficie como en la parte subacuática de los puentes sobre el río Uruguay, indican que pese al medio siglo transcurrido desde su construcción, no hay elementos que indiquen daños, erosiones significativas o desgaste que preocupen, según surge de la exhaustiva inspección decenal encarada por la empresa que fuera contratada a tales efectos.
En el período 2020-2025, la Comisión Administradora del Rio Uruguay (CARU) encaró la gestión en una diversidad de áreas dentro de sus competencias relacionadas con el río Uruguay, entre las cuales figura la administración y mantenimiento de los puentes internacionales, según se destaca en la memoria de gestión que fuera elaborada por la delegación uruguaya en el organismo binacional.
La citada delegación es presidida por Mario Daniel Ayala, actuando como vicepresidente Miguel Feris Grassi, y como delegados María Eugenia Almirón, Roberto Pérez Rodino y Miguel Angel del Campo.
Respecto a los trabajos encarados en el período 2020 a 2024 se destaca la inspección principal de puentes, de carácter decenal, la que había sido postergada debido a la pandemia. Esta actividad implicó la participación de un grupo de trabajo multidisciplinario que incluyó personal de la Secretaría Administrativa así como de ambos puentes y asesores externos de ambos gobiernos.
Este grupo tuvo a cargo la realización de los pliegos de bases y condiciones que permitió la ejecución del llamado a Licitación Pública Internacional 02/22, resultando empresa adjudicataria Celtomac S.A.
En cumplimiento del objeto de la licitación, se realizaron inspecciones visuales, ensayos realizados en las estructuras y accesos a ambos puentes, como así también, inspecciones subacuáticas. Las conclusiones y recomendaciones que forman parte del informe surgen de una serie de actividades de gabinete y campaña.
En el último caso se llevó a cabo inspección ocular de la estructura, realización de ensayos no destructivos (carbonatación, propagación de ondas en el hormigón, esclerometría y pachometría); realización de ensayos dinámicos en la estructura; realización de ensayos de carga de un sector de ambos puentes; y trabajos topográficos para nivelación del tablero. Asimismo, batimetría del cauce del río en la zona de implantación de los puentes y medición de la profundidad de las fisuras en columnas.
En gabinete se llevaron a cabo análisis de antecedentes disponibles; revisión de las planillas de inventario existentes de las estructuras; actualización de las planillas de relevamiento de las estructuras; elaboración de modelos numéricos de análisis y evaluación; análisis de los resultados de las pruebas de carga de los puentes; comparación de la nivelación actual con nivelaciones previas (de proyecto, de inspección del año 2000 y de 2010); comparación de la batimetría actual con las existentes previas (de proyecto, de inspección del año 2000 y de 2010); e inspecciones subacuáticas.
PUENTE PAYSANDÚ-COLÓN
En el caso del Puente General Artigas, el objetivo fue estudiar la evolución de las erosiones en las pilas principales N°10 y N°13 (cuyos antecedentes datan de los años 2014 y 2017), observándose que no ha habido cambios en la zona indicada.
Adicionalmente, se inspeccionaron los cabezales de pilotes de las pilas principales N°11 N°12, que por ser elementos de compleja construcción se consideró necesario evaluar el estado general a través de los años de vida de la estructura. En estos cabezales no se observaron alteraciones que afecten a la durabilidad ni al normal funcionamiento.
También se incluyó el estudio de la pila N°14 con el objetivo de verificar su geometría, ya que en los antecedentes se observó que la misma tiene una fundación particular respecto de las tipologías de las demás pilas del puente. En esta fundación no se observaron sectores con erosión significativa por debajo del cilindro y no se pudo relevar la vinculación entre los pilotes y el cilindro.
PUENTE FRAY BENTOS-GUALEGUAYCHÙ
Respecto al Puente Libertador General San Martín, las inspecciones se focalizaron en el estudio de la cara inferior de los cabezales de pilotes y cilindros de fundación. En estos elementos no se observaron daños ni alteraciones que afecten al normal funcionamiento de la estructura.
Recomendaciones que surgen de la evaluación
Asimismo, los estudios permitieron conocer las recomiendaciones a futuro: Realizar inspecciones de las pilas Nº10 y N°13 del Puente General Artigas para verificar el estado de avance de los sectores de los cilindros que presentaron armaduras expuestas y verificar de manera directa las zonas con erosión del lecho del río. La periodicidad de estas inspecciones deberá ser de 5 años, coincidiendo preferentemente con la Inspección Principal de los puentes. Este período deberá reevaluarse anualmente en oportunidad de que se realice el monitoreo de las erosiones del lecho mediante las batimetrías que periódicamente realiza la CARU.
Los resultados de las distintas tareas realizadas permiten concluir que los puentes se encuentran en buen estado de conservación. No se observaron indicios de agotamiento estructural en los elementos principales de los puentes. Los resultados de ensayos dinámicos, junto con los ensayos no destructivos y las pruebas de carga, permiten concluir que las estructuras se comportan de acuerdo a lo que se puede esperar en función de las características geométricas y elásticas de los materiales que la componen.
Asimismo, la comparación entre la nivelación actual de los puentes y existentes previas indican que los tendidos no han sufrido deformaciones verticales.
