Desde el martes y hasta la víspera, la política de nuestro país se ha visto sacudida al dictaminarse la condena de la Justicia para el actual intendente del departamento de Artigas, Pablo Caram, su primo Rodolfo Caram –que tenía un cargo de confianza en la comuna– y la esposa de éste, la ahora exdiputada y sobrina de Caram, Valentina Dos Santos. La causa se centró en investigar el pago de ocho millones de dólares por concepto de horas extras a funcionarios de la Intendencia que eran designadas por Dos Santos, quien fuera directora general y que su competencia debía limitarse al trabajo legislativo para el que fue electa.
El Partido Nacional emitió una declaración en que indicó que “se han recibido y aceptado las renuncias al Partido de Rodolfo Caram y Valentina Dos Santos, a pesar de que los jerarcas implicados no fueron inhabilitados por la Justicia para ocupar cargos públicos”. “Por su parte, el intendente Pablo Caram ha solicitado que su situación sea derivada a la comisión de ética”, agregaron desde filas nacionalistas.
Tras un proceso abreviado, la Justicia condenó al intendente Caram por el delito de omisión de denunciar delitos de funcionarios departamentales por el caso de las horas extras, una obligación para los funcionarios públicos. Según informó Fiscalía, la Justicia determinó 14 meses de prisión con libertad a prueba para el jerarca departamental. Deberá cumplir además dos horas de tarea comunitaria por semana durante cuatro meses. Asimismo, la condena por este delito no le impide que siga ejerciendo el cargo de intendente de Artigas, ni que pueda presentarse en las próximas elecciones.
Asimismo, también se condenó al exsecretario general de la Intendencia de Artigas Rodolfo Caram, primo del intendente, y a su pareja por la causa sobre el pago irregular de horas extras. Fiscalía informó que la condena fue por un “delito continuado de fraude” para la mujer como autora, y como coautor a Caram. En esta línea, se dispuso una pena de 24 meses de prisión, que será sustituida por libertad a prueba con 10 meses de trabajo comunitario, a cumplirse con cuatro horas por semana. A ambos se les dispuso también la inhabilitación durante cinco años para ejercer “cargos u oficios públicos” y una multa de 1.000 unidades reajustables ($1.724.290) para cada uno.
Por su parte, este miércoles Valentina Dos Santos debió ocupar la silla de los acusados. Luego de la audiencia, a la que arribó bajo abucheos y gritos de “ladrona” por parte de un grupo de vecinos, se dispuso condenarla a 6 meses prisión en modalidad de libertad a prueba en calidad de autora por un delito de usurpación de cargo. Además deberá cumplir tareas comunitarias dos horas semanales durante dos meses.
Al finalizar, Dos Santos brindó declaraciones a la prensa e indicó que tenía dos conceptos básicos, uno era que “iba a trabajar siempre para que los derechos de las personas no se transformaran en necesidades eternas y que los problemas de la gente no tenían un rótulo en lo nacional y departamental, y es en esa forma que siempre trabajé junto al intendente, como lo dije desde el primer momento, y haciendo todas las gestiones necesarias para sacar a nuestro departamento adelante”.
“Estoy muy triste y conmovida por todo esto. Todo lo que he hecho ha sido trabajar por mi pueblo y por mi gente. Y si hice cosas que van más allá de mis tareas como diputada fue simplemente por este afán de trabajar por mi pueblo”, dijo la ahora exdiputada.
Por su parte, su abogado Jorge Barrera dijo que “se asumió el proceso abreviado, a los efectos precisamente de no incurrir en un juicio”. La estrategia elegida conlleva una pena establecida que “no inhabilita para ninguna tarea pública”.
Barrera sostuvo que lo que existió “es clarísimamente un compromiso que asumió mi patrocinada con Artigas”. “Hubo un exceso de celo” de parte de Dos Santos en el cumplimiento de sus tareas. “En su equipo de trabajo por el bienestar tuvo ese compromiso, y bueno, el exceso de celo quizá la llevó a realizar tareas que no eran propiamente legislativas por lo tanto, del punto de vista estrictamente formal, aún cuando se violentaron algunas de estas normas, nosotros optamos por ir a un juicio abreviado”, dijo.
“UNA PRUEBA DURA Y AMARGA”, DIJO CARAM
El intendente de Artigas, Pablo Caram, escribió una carta dirigida a la ciudadanía luego de haber sido condenado en que expresó que le tocó “pasar una prueba dura y amarga, de esas que te pegan, te chocan”.
“Hace diez años asumí como intendente, y humildemente creo que hemos realizado una gestión histórica, lo que ya ha dejado su legado, con obras que han transformado al departamento. Por conductas de terceros me vi manchado en mi honor, se cuestionó mi hombría de bien. Ante los hechos de pública notoriedad tomé una decisión meditada pero muy difícil, la que aún me genera contradicciones”, indicó. Y continuó: “No creo en ‘embestidas bagualas’, creo en el sistema republicano y en la Justicia. Sin perjuicio de ello, creo que me vi expuesto a una situación sin ecuanimidad. Si omití hacer algo, que es lo que se me cuestiona, lo hice sin ningún tipo de intención. Aclaro que la denuncia la hice. Con todo esto entiendo que puedo continuar caminando y recorriendo el departamento con la frente en alto, con la conciencia tranquila, pudiendo mirar a cada uno de ustedes a los ojos. Estoy convencido de que la ciudadanía sabrá valorar mi accionar, sigo creyendo en el proyecto de Artigas Adelante, el que sigue vigente y vigoroso”.
Finalmente, el jerarca expresó que tras los acontecimientos dados en la Justicia ahora hay que “dar vuelta la página, volver y redoblar esfuerzos”. “Arremangarnos y a seguir trabajando comprometidas con el desarrollo del departamento. Gracias a todos por el cariño. El futuro nos espera”, finalizó la misiva del intendente. → Leer más